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En otras oportunidades hemos hablado sobre el alarmante incremento en el caso de victimas de bullying en Latino América, sin embargo según los datos presentados por la UNESCO, uno de cada cinco niños en el mundo sufren de algún tipo de bullying. Esto significa que 246 millones de niños y adolescentes en el mundo padecen esta terrible realidad. Y quien sabe cuántos no son incluidos en la característica porque lo viven en silencio…

Aprovechando que se termina el año escolar, es la oportunidad perfecta para que los padres tomemos un papel más activo y conversemos con nuestros hijos en un ambiente seguro ¿Cómo vivieron nuestros hijos su año escolar? No debemos olvidar que con el impacto de las redes sociales y el acoso cibernético el bullying no toma vacaciones y debemos contar con suficientes argumentos e información para poder prevenirlo e identificarlo desde una etapa temprana y evitar sus terribles consecuencias.

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Martínez Mendoza, psicólogo y especialista en neurociencia y educación de la primera infancia, en conjunto con la Asociación Mundial de Educadores Infantiles (AMEI-WAECE) publicó un trabajo dirigido a los maestros de educación primaria donde explicaba el problema del bullying y su relación con la etapa de educación infantil. En su análisis Martínez Mendoza indicaba que aunque el bullying no se manifestaba directamente en la etapa infantil, si es en esta cuando comienza a gestarse (Entre los 5 y 6 años de edad).

De acuerdo con los expertos esta etapa es crucial para el desarrollo de los niños por dos motivos fundamentales:

El desarrollo físico y mental de los niños les permite desarrollar actitudes, conductas y comportamientos que conformaran su personalidad y manera de abordar los problemas cuando lleguen a la etapa de primaria.

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Muchos de los niños que se convierten en acosadores suelen provenir de familias disfuncionales. De esta forma el estudio de Martínez Mendoza pone principal interés en la importancia que tienen las instituciones educativas y su personal, para prestar una atención especial a este tipo de familias y atender a tiempo el impacto que pueda tener el hogar en el desarrollo social del niño.