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En la era digital, que rápidamente se está apoderando de nuestro mundo, hay que ser bastante precavidos para saber quiénes son «reales» en cómo dicen ser, tanto en la realidad virtual como en la realidad física, para evitar caer en desagradables encuentros o en acosos virtuales, como es el caso del grooming.

Este es un tipo de acoso cibernético que se basa en un adulto que engaña a un menor a través de las redes sociales, haciéndole creer que es alguien de su edad, con el fin de «mantener una relación» clandestina con esa persona, ganarse su confianza y luego manipularla o chantajearla para obtener algo más e incluso puede ocurrir abusos sexuales una vez que se conozcan en persona.

¿Cómo es posible detectarlo?

Existen una serie de fases en las que se genera el grooming, así que hay que estar vigilantes con respecto a las personas con quienes se chatea en el Internet.

  • Fase de amistad: Este es el primer acercamiento, en donde se busca construir la confianza necesaria para poder interactuar de manera continua. En esta se busca conocer todo lo posible de las víctimas: gustos, preferencias, relación familiar, amistades, salidas, etc.

 

  • Fase de relación: En esta la interacción se vuelve más íntima, el acosador busca que su víctima comparta con él algunas situaciones de su vida, confesiones, conflictos parentales o escolares, miedos y deseos. La intención del acosador es buscar puntos débiles para explotarlos luego a su favor y para ello se vale de inventar sus propias cuestiones personales y compartirlas con su víctima.
  • Fase sexual: Aquí comienzan a aparecer los componentes sexuales de la relación, puede comenzar con conversaciones intimas acerca de desear al otro, estar con él en un ámbito sexual hasta peticiones de fotos sensuales, desnudos y participación en grabaciones

La finalidad de obtener toda esta información es adquirir el poder suficiente para tener a la víctima bajo control y así poder hacer lo que el acosador quiera, desde seguir la relación hasta extorsionarla financieramente. Por eso hay que tener cuidado con quienes nos relacionamos en la internet, verificar su autenticidad de perfil y cortar la relación si percibimos alguno de los puntos anteriores.