Uno de los tipos de bullying más difíciles de reconocer y enfrentar es el bullying emocional, aunque, por supuesto nadie quiere ser tratado mal, humillado, molestado, chantajeado o intimidado por otra persona de cualquier entorno, sin embargo, este tipo de bullying se caracteriza en que se distorsiona la realidad de la persona en cuanto al significado del cariño y la forma de obtenerlo, incluso aceptando que estos abusos son por su propio bien o para ayudarlos a mejorar.

Pero la realidad es muy distinta pues, el abusador solamente quiere imponer su poder sobre la víctima, buscando la sumisión total bajo su control. Lo peor de estos casos es que pueden ser practicados tanto por niños, jóvenes, adultos y entre ellos son importar la edad, es decir, que incluso los hijos pueden abusar emocionalmente de sus padres, puede ocurrir en la pareja o en la escuela.

¿Cómo reconocer este tipo de abuso?

Lo primero que debemos tener en cuenta sobre esto, es que todo acto que nos cause malestar o incomodidad porque nos obligan a hacerlo, nos ignoran o se generan burlas de forma repetitiva, entonces existe un problema allí, sin importar de quien provenga, sea del hogar, de la escuela o de la pareja. Nadie tiene el derecho de controlarnos o hacernos sentir mal sin razón alguna.

Entonces, presta atención a estas señales:
  • Tratos dobles: Si existe una o varias personas que tienen una actitud de rechazo o hablan mal a tus espaldas, buscan siempre hacer burlas “inocentemente” de todo lo que hagas, buscan tu bienestar obligándote a hacer cosas que no quieres o no te incluyen en actividades, pero aun así son amables contigo en público. Entonces esa persona es una controladora y abusadora emocional pues quiere retenerte a su lado para complacerla pero no se interesa en pasar tiempo contigo.

  • Control: Si utiliza el chantaje, la manipulación, la intimidación o quiere convencerte arduamente de que no hagas o por el contrario, si realices algo porque “es lo mejor” para ti o para ambos. Es otra forma de abuso emocional, pues busca transformarnos en otra cosa que no somos para complacerlos y estar bien con ellos mismos, al punto de hacernos sentir mal si no lo hacemos.
  • Acciones contradictorias: A pesar de que todas las señales anteriores indican un claro abuso emocional controlado por parte de la persona que ejecuta el bullying, explican que es por nuestro propio bienestar, sin embargo, estas carecen por completo de empatía y remordimiento, lo que buscan es tomar dominio sobre una persona que saben, no pueden contradecirlos.