Si bien es cierto que la televisión a veces solo deja espacio para desear las cosas que no tenemos, al mostrar una realidad perfecta donde no existen los problemas o en donde se resulven sin mayores inconvenientes y todos viven «felices por siempre», la televisión también ha asumido algunos retos más vividos de las problemáticas de la sociedad, como lo es el caso del bullying escolar.
En la mayoría de las series de drama adolescente, podemos ver cómo se desenvuelven en mayor o menor frecuencia acontecimientos sobre el acoso escolar, pues es la realidad que la mayoría de las escuelas alrededor del mundo viven, precisamente, porque los que se encuentran tras bastidores de estas producciones conocen los efectos que pueden tener sobre la audiencia.
¿Están bien o están mal estas transmisiones?
Hay que recordar que el público infanto-juvenil es altamente influenciable por los canales televisivos y los medios de comunicación de Internet. Esto se debe a que, a través de lo que ven pueden retratar su vida, imaginarsela o desearla de esa manera, por lo que pueden copiar las actitudes de sus personajes favoritos, al identificarse con ellos, porque quieren ser ellos.
Debido a esa misma razón se ha generado toda una división de opiniones acerca de estas series televisivas que, parecen evolucionar con el paso del tiempo.
Si vs No
Si bien es cierto que se puede tomar a la televisión como un recurso positivo para enseñarle a los hijos acerca de lo que está bien o no lo está, en lo que respecta a las acciones diarias, como lo es ser perpetuadores de bullying o cómo defenderse ante estos actos de acoso, es también cierto que puede causar el efecto contrario y reforzar las actitudes negativas y problemáticas delos hijos.
Así que, si como padres se ha de tomar este recurso de la televisión para mostrar la realidad del bullying o para generear un canal de comunicación con los hijos, hay que hacerlo con objetividad y responsabilidad, talvez de la mano de un experto psicólogo que poueda asesorar cuál es la mejor forma de abordarlo.