Acoso social: Una forma de bullying escolar poco detectado

Ciertas acciones y condiciones fomentan el bullying que puede generarse en cualquier ambiente educativo o familiar.

Algunas de las circunstancias, según estudios e investigaciones de algunos expertos y autores como Carlos Fernández Espada Ruiz, alertan sobre las consecuencias que provocan el acoso en el ambiente escolar, a saber:

  • El tamaño del centro escolar, cuanto más grande mayor será el riesgo de que se proporcione el acoso escolar.
  • La falta de control físico y de vigilancia en el recinto escolar.
  • El proyecto educativo no debe limitarse sólo a enseñar, pero también a generar comportamientos sociales asertivos.

    Entre las causas familiares del acoso se pueden enumerar algunas como:

  • Ausencia de un padre o una presencia violenta, situación que puede generar un comportamiento agresivo en los niños y adolescentes.
  • La situación socioeconómica o la mala organización en el hogar, pueden contribuir a que los niños y adolescentes tengan una conducta agresiva.

Así, el bullying puede residir, contradictoriamente, en sus educadores, modelos de los niños y adolescentes, educadores y familiares, entes educativos y formativos, quienes pueden coincidir en extremos. En la ausencia de valores, la omisión del trazado de límites y la falta de definición de reglas de convivencia en divergencia con el otro extremo en que se aplican castigos a través de la violencia o la intimidación.

Modelaje que se imprime en la memoria de niños y adolescentes como si de barro fresco se tratase y que más tarde exteriorizan, comportamiento que cree ser una actuación correcta y normal, actos de violencia que repite por el modelaje al que ha sido expuesto.

En fin algunas de las causas del bullying son la intimidación, la humillación, la amenaza, la exclusión entre el personal docente y los alumnos, entre padres e hijos y demás familiares, especialmente la falta de amor y respeto que llevan a un clima de violencia y a situaciones de agresión.

El bullying entre niños y adolescentes indican que existen, además de características individuales, aspectos contextuales que lo determinan. De allí que se espere que se desarrollen otras investigaciones en el sentido de la prevención, estudios que se quiere ofrezcan herramientas para erradicar este flagelo de la sociedad actual.