El acoso escolar, mejor conocido como “bullying” es todo aquel maltrato físico o psicológico que se le da a un niño o niña por parte de los demás integrantes del grupo social. El acoso escolar es una especie de tortura, metódica y sistemática, en la que el agresor sume a la víctima, a menudo con el silencio, la indiferencia o la complicidad de otros compañeros.
El bullying es en realidad una práctica muy común (lamentablemente) entre los niños y niñas de las escuelas, colegios, preparatorias y demás; normalmente el agredido (el que sufre el bullying directamente) suele ser el individuo física y/o psicológicamente más vulnerable, chicos muy delgados o muy gordos que se sienten inseguros sobre su cuerpo, chicas que tienen el autoestima muy baja y a menudo se menosprecian a sí mismas, etc.
De las inseguridades que sufren los demás suelen aferrarse, por decirlo de alguna manera. Los “bully” que es cómo se les llama a las personas que ejercen el bullying, lo hacen para imponer su poder sobre el otro, a través de constantes amenazas, insultos, agresiones o vejaciones, y así tenerlo bajo su completo dominio a lo largo de meses e incluso años.
Los agresores (los bully) suelen tener también inseguridades que buscan ocultar humillando a los demás, por ejemplo, existen bullys que son rechazados por la gran mayoría de compañeros pero que aún así tienen un pequeño grupo de amigos que comparten y alientan su conducta agresiva, también hay el caso contrario que son aquellos que no tienen capacidad autocrítica y en consecuencia sufren de egocentrismo, exceso de autoestima y esta conducta los lleva a tratar siempre de rebajar a los demás dándose a sí mismo un complejo de superioridad.
Rafael Núñez Aponte comenta que el bullying cada día disminuye gracias a las intensivas campañas alrededor del mundo que se realizan para frenar este tipo de conductas, sin embargo es importante mantener la comunicación con los niños, niñas y educadores (que son los adultos más cercanos en este entorno escolar) para poder intervenir en caso de que se sospeche de que un niño/a esté sufriendo de acoso en su escuela.